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Bosquejos Bíblicos
Predica de hoy: Hazte sentir en el corazón de Jesús
Texto bíblico principal: “Entonces Jesús dijo: ¿Quién es el que me ha tocado? Y negando todos, dijo Pedro y los que con él estaban: Maestro, la multitud te aprieta y oprime, y dices: ¿Quién es el que me ha tocado? Pero Jesús dijo: Alguien me ha tocado; porque yo he conocido que ha salido poder de mí.” Lucas 8:45-46
Introducción
Cada vez que escudriño esta parte de la biblia, no me dejo de asombrarme. La realidad es que es algo impactante. Esta es la historia de la mujer que llevaba 12 años sufriendo de flujo de sangre. Ella había recurrido a muchísimos médicos, y había hecho todo lo humanamente posible para sanarse pero no había tenido solución hasta ahora.
Jesús iba camino hacia donde la hija de Jairo a hacer un milagro, y había una gran multitud. Cuando aquella mujer que sufría del flujo de sangre se arrastró hasta Él y tocó su manto. ¿Están entiendo lo que pasó después de esto?
Veamos que nuestro versículo principal dice que Jesús sintió que lo tocaron. ÉL LO SINTIO. ¿Qué pasa? Había muchísimas personas alrededor de Jesús, cualquier persona pudo haberlo tocado pero Él reconoció que había una persona en especial, porque dice que Jesús dijo que Él había conocido que había salido poder de Él.
Ahora bien, por otro lado, la mujer del flujo de sangre decidió tocar el borde del manto. ¿Ustedes se imaginan? Hace 2000 años una mujer cuando tenía la menstruación la consideraban inmunda, y tenía que ser desechada por la sociedad. Si no era así tenía y corría el peligro de ser asesinada, ella se decidió hacer sentir en el corazón de Jehová, porque tenía claro que en Él encontraba respuesta y vida en abundancia.
I. Con un solo borde
“Se le acercó por detrás y tocó el borde de su manto; y al instante se detuvo el flujo de su sangre” Lucas 8:44
Esta mujer que padecía de una enfermedad a la cual no le había hallado solución nunca, se acercó a Dios creyendo que podía ser sana y solo toco el borde de Su manto y fue sana de inmediato.
Amados, cuando nosotros venimos a Jesús no solo venimos a Él, sino que causamos un impacto en Su corazón, que Él nos sienta. Que toquemos el corazón de Jesús con una oración, con una adoración, con una danza, hasta con nuestra obediencia.
¿Qué hay en el corazón de las personas? En este caso en el corazón de la mujer del flujo de sangre estaba segura de que en Jesús iba a encontrar la respuesta. Eso quiere decir que en su corazón tenía la certeza que por fin iba a encontrar la sanidad. Ella tenía la seguridad que en ese momento iba a cambiar su vida sin importar que murieran en ese instante.
II. Sal, no quedes en lo oculto
“Entonces, cuando la mujer vio que no había quedado oculta, vino temblando, y postrándose a sus pies, le declaró delante de todo el pueblo por que causa le había tocado, y como al instante había sido sanada” Lucas 8:47