Bosquejos Bíblicos
Prédica de hoy: Estudiar para crecer
Texto Bíblico Principal: “Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, y que obtiene la inteligencia” Proverbios 3:13
Introducción
El mejor regalo que podemos recibir es el de estudiar. Dios puso el conocimiento a nuestro alcance y somos privilegiados cuando tenemos la oportunidad de ir a buscarlo. Estudiar nos hace crecer y movernos de lugar, nos transforma.
Dicen que en la ignorancia hay felicidad, pero no exactamente. Cuando no entendemos lo que nos rodea hay vacío, miedos y nada qué pueda defendernos del mal. Por eso al crecer necesitamos que alguien nos guíe, ya qué por nosotros mismos no sabemos nada.
Estudiar nos da poder. Sí hay algo que asusta es un pueblo unido y lleno de conocimiento. ¿Ya empezaste?
I. Estudiar habitando el conocimiento (2 Timoteo 2:15)
Existe una diferencia rotunda entre conocer algo ó simplemente saberlo. Nosotros debemos estudiar intentado abarcar lo qué estudiamos. Es decir, no de manera mediocre, sino realmente atravesando la experiencia, con interés y habitandolo.
No es lo mismo decir qué sabemos quién fue a Jesús a realmente conocerlo. Todos sabemos de su existencia, la importancia que tuvo en la historia, pero ¿conocemos para qué vino? ¿por qué debemos seguirlo y cuales son sus enseñanzas? Esto es lo qué debemos aspirar.
El estudio debe volverse experiencia para qué trascienda y transforme. El conocimiento está hecho para qué conmueva. Por esto es importante estudiar con verdad, no para el mundo, sino para aprobación de Dios.
II. Motivaciones e intenciones al estudiar (Proverbios 15:33)
Estudiar es poderoso, sí, pero debe ser un acto hecho con intenciones claras. No estudiamos por poder, sino por temor. Nada podremos aprender sí no lo hacemos para la honra del Padre. Es él quien nos da discernimiento para entender.
Para discernir lo qué Dios quiere qué aprendamos con algo, necesitamos agudizar los sentidos. Todas éstas cosas solo podemos hacerlas con su permiso. Querer pasar por encima de su nombre no lleva a un conocimiento claro, pues solo en él existe verdad.
Debemos estudiar con humildad, soltando el orgullo ó queriendo darnos importancia. Sí enseñamos y aprendemos es porque Jehová lo permite, de otra manera sería imposible.
No debemos estudiar pretendiendo hacernos iguales a Dios.