Parábola de los dos hijos

Mensajes Cristianos

Mensajes Cristianos predica de hoy: Parábola de los dos hijos

Mensajes Cristianos lectura bíblica de hoy: Mateo 21:28-32

Introducción

Intenciones. Muchas veces tenemos la intención o las ganas de hacer algo, pero tenga algo en cuenta, las intenciones no valen, lo que vale es el resultado. Muchas veces decimos que haremos algo y al final no lo hacemos, o todo lo contrario decimos que no haremos algo y después nos arrepentimos y lo hacemos.

Aquí Jesús nos habla en una parábola acerca de un padre que tenía dos hijos y les dijo que fueran a trabajar a la viña, el primero le dijo: “no quiero”; pero luego arrepentido fue. Le dijo lo mismo al segundo pero él le dijo: “si, señor voy a ir”, pero no fue. Y Jesús le preguntó a la multitud que lo escuchaba: ¿cuál de los dos hizo la voluntad de Dios? 

El la parábola de los dos hijos el padre representa a Dios

El padre dio la misma instrucción a ambos hijos, no había favoritismo, ambos podían obedecer o desobedecer. Los hijos terminaron haciendo lo contrario de lo que dijeron que harían, así que la pregunta que Dios hizo fue simple ¿Quien hizo lo correcto? Y la respuesta es fácil de descifrar, el hijo que al final obedeció la orden de su padre.

Recuerdo que una vez mi mamá me dijo que hiciera algo mientras ella iba a trabajar, y yo le dije que sí que lo haría. Luego ella llego del trabajo y comenzamos hablar de lo que habíamos hecho en el día, y me pregunta “¿hiciste lo que te pedí?” Y hay me entra el pánico porque no lo hice, porque no tuve tiempo, o simplemente se me olvido.

Cuando Dios mandó a Abraham a sacrificar a su hijo, él pudo haber pensado miles de cosas que hacer contraria a sacrificar a su hijo, pero en la biblia no sale que lo hizo, él solo obedeció a la orden de Dios.

El primer hijo en la parábola de los dos hijos

El primer hijo representa a los recaudadores y prostitutas, todos los pecadores. Que de primera no querían de Dios, no querían conocerlo, servirle. Pero luego cuando escucharon a Juan el Bautista cambiaron de opinión se arrepintieron y como el primer hijo se fueron a trabajar a la viña de su padre. ¿Cuántos de los que estamos aquí  comenzamos así diciendo no a la voluntad de Dios,  y luego vimos el gran y profundo amor que tiene por cada uno de nosotros? 

Aquí Dios no hace diferencias en ninguno de los dos hijos ni hay favoritismo, él les da a los dos la misma orden y queda en la decisión de cada uno obedecer o no. Y así es la realidad;  muchas veces Dios le da a sus hijos órdenes “ve y predica”, “ve y usa tu don”, “ven y usa aquello que te entregue”.

Y muchas veces le decimos “ sí Señor lo haré”; pero luego no lo hacemos o nos olvidamos de hacerlo como lo hizo el segundo hijo. Y luego le preguntamos a Dios: “¿Dios por qué esto” y Él te responde: “¿hiciste lo que te ordene que hicieras”

Muchos dicen: “yo le trabajo a Dios”, “yo sigo todos los mandamiento”, “yo trabajo en la iglesia”, “yo me crié en la iglesia”, “soy pastor”, “soy obispo”, “soy corista”. No puedes decir esas cosas y ser desobediente, porque decimos esas cosas y nos comportamos con el segundo hijo que le dijo a su padre “sí señor iré”, pero luego pasa el tiempo y pasa y seguimos ahí mismo y luego vienen los lamentos,

Comclusión

Muchas veces decimos obedecer a Dios, a decir que obedecemos la voluntad de Dios cuando nuestras acciones dicen todo lo contrario. Usted tiene que comportarse como un hijo de Dios aquí, en su casa, en su trabajo, en la escuela.  y nunca niegue a Dios ni lo que Él a hecho con usted porque recuerde lo que dice en: 

En 2 Timoteo 2:12 dice: “Si sufrimos, también reinaremos con él; Si le negamos, él también nos negará.

En Mateo 10:33 dice: “Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.

El mensaje de esta parábola es fácil de entender, sigue la voluntad de Dios, escucha la voz de Dios y obedece Su palabra.

© Sol Maldonado. Todos los derechos reservados.

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Sol Maldonado
Sierva de Jesucristo y amante de la palabra de Dios.

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