Dios nunca se olvida

Mensajes Cristianos

Mensajes Cristianos Predica de Hoy: Dios nunca se olvida: Un mensaje de esperanza para mujeres

Mensajes Cristianos Lectura Bíblica: Isaías 49:15

Introducción

Queridas hermanas en Cristo, que la paz del Señor esté con todas ustedes. Como esposa de un pastor, mi corazón rebosa de gratitud por poder compartir con cada una de ustedes este mensaje de esperanza y consuelo.

En los tiempos difíciles y los momentos de incertidumbre, es fácil sentir que Dios nos ha olvidado. Sin embargo, hoy quiero recordarles con amor y certeza que nuestro Dios fiel nunca nos abandona. El tema de nuestro mensaje de hoy lo encontramos en Isaías 49:15, una promesa preciosa que nos llena de esperanza y nos asegura que Dios siempre tiene presente a sus hijas.

I. Dios nos ama con un amor eterno: Dios nunca se olvida

Las pruebas en la vida cristiana
Las pruebas en la vida cristiana

En medio de las pruebas y las tribulaciones, puede ser tentador creer que Dios nos ha abandonado. Pero la verdad es que Él nos ama con un amor inquebrantable. Isaías 49:15 nos dice: “¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque ella lo olvide, yo nunca me olvidaré de ti.”

¡Qué promesa tan hermosa! Imagina a una madre olvidándose de su propio hijo, ¿es eso posible? ¡Claro que no!

Y de la misma manera, Dios, nuestro Padre celestial, nunca nos olvida. Su amor por nosotras es eterno, como el amor de una madre por su hijo.

a. ¿Por qué Dios nunca se olvida? Dios nos creó a su imagen

Cuando considero cómo Dios nos creó a Su imagen, no puedo evitar maravillarme ante la grandeza de Su diseño. ¿No es asombroso pensar que Él nos conoció incluso antes de que nuestros ojos vieran la luz del día? Jeremías 1:5 nos revela: “Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses, te santifiqué; te di por profeta a las naciones.” ¡Dios tenía un propósito especial para nosotros antes de que nuestra historia comenzara!

Somos Su creación más preciosa, moldeadas por el Creador mismo con amor y cuidado. El Salmo 139:13-14 proclama: “Porque tú formaste mis entrañas; me hiciste en el vientre de mi madre. Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; estoy maravillado, y mi alma lo sabe muy bien.” ¡Qué hermoso recordatorio de que fuimos diseñadas con un propósito y con un valor único!

Y aún más asombroso es saber que, a pesar de nuestras imperfecciones, nunca estamos fuera de la mente ni del corazón de Dios. ¿Alguna vez te has sentido insignificante, como si nadie se preocupara por ti? Pero 1 Pedro 5:7 nos invita a “echar toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.” ¡Dios tiene cuidado de nosotras! Cada pensamiento, cada preocupación, todo lo que nos afecta, es importante para Él.

¿Y qué decir del amor con el que fuimos creadas? Dios, en Su amor incondicional, nos ha dado Su propia imagen. 1 Juan 4:7-8 nos dice: “Amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.” Al ser creadas a imagen de un Dios de amor, estamos llamadas a amar a otros con ese mismo amor divino.

Así que, hermanas, al reflexionar en cómo fuimos creadas a imagen de Dios, recordemos que Él nos conoció antes de nacer, nos diseñó con un propósito especial y siempre está atento a nuestras vidas. Seamos portadoras de Su amor y recordemos que somos Sus hijas amadas, valiosas y preciadas en Su reino.

b. Dios nunca se olvida: Él nos redimió con Su sangre

Hermanas, meditemos en el asombroso acto de redención que Dios realizó por nosotras en la cruz. ¿Alguna vez te has preguntado cuánto valía para Dios cada uno de nosotros? 1 Corintios 6:20 nos recuerda: “Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.” ¡Fuimos compradas con un precio inimaginable: la vida misma de Jesús!

Cuando Jesús entregó Su vida por nosotras, Él no estaba mirando nuestras imperfecciones o pecados, sino que nos amó con un amor que trasciende cualquier barrera. Efesios 1:7-8 nos muestra el alcance de esta redención: “En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia, que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia.

Rescatados por un alto precio
Rescatados por un alto precio

Imagina esto: el Hijo de Dios, quien moraba en gloria eterna, se hizo carne y sangre para pagar el precio de nuestra redención. Y lo hizo por amor a nosotras, para que pudiéramos ser reconciliadas con Dios. Colosenses 1:19-20 nos revela: “Porque agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.

Este sacrificio de amor inmenso nos muestra cuánto valoramos para Dios. Somos Su tesoro preciado, y no hay nada que Él no esté dispuesto a hacer por nosotras. Juan 15:13 nos enseña: “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.” Y gracias a Jesús, somos amigas de Dios, somos Su familia, y Él puso Su vida por nosotras.

En respuesta a este amor inmerecido, ¡glorifiquemos a Dios con nuestras vidas! Que cada día sea una expresión de gratitud y adoración por el amor incondicional que nos ha sido dado. Y compartamos este mensaje de redención con otros, para que más personas puedan experimentar la maravillosa libertad y esperanza que encontramos en la cruz de Cristo.

II. Dios nunca se olvida, Él nos sostiene en las pruebas

En los momentos más oscuros de nuestra vida, es normal preguntarnos si Dios nos ha olvidado. Sin embargo, Dios no solo nos ama, sino que también nos sostiene y fortalece en medio de las pruebas.

a. Dios es nuestra fortaleza, Dios nunca se olvida

El Salmo 46:1 nos asegura: “Dios es nuestro refugio y fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia.” ¿Alguna vez has sentido que te encuentras en medio de una tormenta, sin saber a dónde acudir? En esos momentos, recuerda que Dios es nuestra fortaleza inquebrantable.

En el libro de Isaías 40:29-31, encontramos un recordatorio poderoso: “Da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.

Isaías 26:20 Un refugio seguro
Un refugio seguro

Nuestro Padre celestial es un refugio seguro en medio de las dificultades. Cuando enfrentamos momentos de angustia, Él está ahí para darnos la fuerza que necesitamos. En Filipenses 4:13, Pablo nos recuerda: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” Confiar en Dios nos permite superar cualquier desafío, sabiendo que Su poder nos acompaña en cada paso del camino.

Además, el Salmo 73:26 nos enseña: “Cerca está Dios de los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu.” Cuando nuestras fuerzas flaquean, Él está cerca, listo para levantarnos y sostenernos en Sus brazos amorosos.

Incluso en medio de la oscuridad, no tenemos que temer, porque el Señor es nuestra luz y salvación. Salmo 27:1 nos dice: “Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?” Él nos guía y nos protege en cada paso de nuestra jornada.

Así que cuando enfrentes desafíos, no confíes en tus propias fuerzas, sino en el poder de Dios. Él es tu refugio, tu fortaleza y tu ayuda segura en todo momento. Permite que Su amor y fortaleza te envuelvan, y recuerda que en Él encontrarás la paz que sobrepasa todo entendimiento. ¡Confiemos en nuestro Dios todopoderoso, nuestra fortaleza en cada tormenta de la vida!

b. Dios obra para nuestro bien

Aunque no siempre entendamos Sus caminos, podemos descansar en la certeza de que Dios está obrando en nuestras vidas para nuestro bien. Romanos 8:28 nos dice: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien.

¿Alguna vez has enfrentado circunstancias difíciles y te has preguntado por qué Dios permite que sucedan? A veces, los caminos de Dios pueden ser difíciles de entender, pero podemos tener la seguridad de que Él siempre está obrando para nuestro bien. Jeremías 29:11 nos asegura: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Aunque las situaciones puedan parecer desalentadoras, Dios tiene un plan perfecto para cada una de nosotras. Incluso cuando todo parece estar fuera de control, podemos confiar en que Dios está obrando en el trasfondo para llevar a cabo Su propósito. Proverbios 16:9 nos dice: “El corazón del hombre piensa su camino; mas Jehová endereza sus pasos.”

Incluso en medio de las pruebas, podemos experimentar la paz que sobrepasa todo entendimiento. Filipenses 4:6-7 nos recuerda: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

Dios puede usar incluso las adversidades para fortalecernos, enseñarnos lecciones valiosas y moldearnos a Su imagen. Santiago 1:2-4 nos dice: “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.

Entonces, en medio de los desafíos, confiemos en que Dios tiene un propósito mayor en mente. No siempre entenderemos Sus caminos, pero podemos descansar en la certeza de que Él está obrando para nuestro bien. Nuestro Dios es fiel, y podemos confiar plenamente en Su amor y cuidado por nosotras. ¡Sigamos adelante con esperanza, sabiendo que en Él encontramos el bienestar eterno!

III. Dios nunca se olvida: Él cumple sus promesas

En los momentos de espera y anhelo, podemos sentir que Dios ha olvidado Sus promesas. Pero la Palabra de Dios es clara: Él siempre cumple lo que ha prometido.

a. Dios es fiel a su Palabra

En Josué 21:45 encontramos que se nos dice: “No faltó palabra de todas las buenas promesas que Jehová había hecho a la casa de Israel; todo se cumplió” Podemos confiar en que lo que Dios ha prometido, lo cumplirá en Su tiempo perfecto. ¿Alguna vez te has preguntado si Dios cumple Sus promesas?

La respuesta es un rotundo sí. Nuestro Dios es fiel a Su Palabra, y cada promesa que ha hecho se cumplirá. Números 23:19 nos asegura: “Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?

Sirvamos a Dios con fidelidad
Sirvamos a Dios con fidelidad

En momentos de incertidumbre, podemos aferrarnos a la promesa de Dios en Isaías 55:11: “Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.

Abraham es un ejemplo vivo de cómo Dios cumple Sus promesas. Hebreos 6:15 nos muestra cómo Abraham “habiendo esperado con paciencia, alcanzó la promesa.” A pesar de las dificultades y el tiempo transcurrido, Dios fue fiel a Su Palabra.

Además, el Salmo 145:13 proclama: “Fiel es Jehová en todas sus palabras, y santo en todas sus obras.” Su fidelidad es constante y segura.

Así que, hermanas, pongamos nuestra confianza en Dios y Sus promesas. No importa cuán improbable o imposible parezca, Él es fiel y cumplirá lo que ha dicho. A veces, Su respuesta puede tardar, pero nunca falla. ¡Permanezcamos firmes en Su Palabra y veamos cómo se manifiesta Su fidelidad en nuestras vidas!

b. Dios se nunca olvida y promete estar con nosotras

Isaías 41:10 nos consuela con estas palabras: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo.” Dios está siempre a nuestro lado, sosteniéndonos y fortaleciéndonos.

¿Has sentido alguna vez que estás sola y desamparada en medio de tus luchas? No temas, porque la promesa de Dios es clara: Él siempre estará con nosotras. Josué 1:9 nos anima: “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

Nuestro Señor es un Dios cercano, siempre presente en nuestras vidas. El Salmo 139:7-10 nos dice: “¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra.

Incluso en los momentos de mayor oscuridad, Dios nos asegura que Su presencia nos guiará y nos sostendrá. Isaías 43:2 nos reconforta: “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.

Entonces, hermanas, no importa cuán difícil sea la situación en la que te encuentres, recuerda que Dios promete estar contigo. Su presencia te da valentía, consuelo y fuerzas para seguir adelante. Confiemos en Su promesa, porque Él es fiel, y siempre estará a nuestro lado, sosteniéndonos con Su mano poderosa. ¡Nunca estás sola, porque el Dios Todopoderoso está contigo!

Conclusión

Queridas hermanas, a lo largo de la Biblia encontramos innumerables ejemplos del amor inquebrantable de Dios. Él nos creó a Su imagen, nos redimió con Su sangre y nos sostiene en cada prueba. Además, cumple cada una de Sus promesas. Así que, cuando te sientas olvidada, recuerda las palabras de Isaías 49:15: Dios nunca se olvida de ti. Él te ama con un amor eterno, y siempre está a tu lado, sosteniéndote con Su mano poderosa.

Tomemos un momento para orar juntas y agradecer a Dios por Su amor incondicional. Oremos para que Su presencia y promesas sean una realidad tangible en nuestras vidas. Y compartamos este mensaje de esperanza con otras mujeres que necesitan recordar que Dios nunca las olvida. Juntas, como hermanas en Cristo, podemos apoyarnos y edificarnos mutuamente en nuestra fe.

Bendiciones abundantes para cada una de ustedes.

© Hilda T. Hernández. Todos los derechos reservados.

Predicas Bíblicas .. Mensajes Cristianos para mujeres

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio