Mensajes Cristianos
Mensajes Cristianos Texto Bíblico: Génesis 4:6-7 “Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué ha decaído tu semblante? Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.”
Una de las características de la persona de Dios, es la voluntad, pero ¿qué pasa cuando se trata de nosotros los seres humanos? Primero en cuanto a Dios es la determinación, el deseo, el consentimiento y el asentamiento en cuanto a todo lo que existe en el universo.
En los seres humanos, es la facultad de decidir y ordenar la propia conducta o acto que con la potencia volitiva admite o rehúye una cosa, queriéndola o aborreciéndola y repugnándola.
El pecado no está adentro
Ahora bien veamos bien lo que Dios le dice a Caín; el pecado no está adentro, solo está a la puerta, en ese momento solo un pensamiento que pasaba por su cabeza, pero sería Caín y solamente él, que debía decidir si dejaba entrar o no esta maldad que le acechaba, Dios le proveyó de un arma poderosa para librarse de este pecado, cuando le dijo: tú te enseñorearas de él.
Lo que Dios le estaba diciendo con esto, es que podía dominar sobre el pecado, pero no lo hizo y cometió el pecado. Pasa que en la mayoría de las veces se acciona primero para después solo inventarnos una excusa para nosotros mismo primeramente y para los demás, si fuéremos confrontados, pasando nuestra responsabilidad a algo o a alguien, usamos excusas como por ejemplo: no lo pude resistir, todos lo hacen, nadie es perfecto, el diablo me obligó y esto solo por mencionar algunas.
La tentación
Pero la tentación solo es inducción o estímulo a pecar, nunca nos obliga a hacer algo que nosotros no determinemos hacer voluntariamente, es necesario que se entienda esto si se quiere vivir una vida integra para Dios, no quiero decir con esto que un creyente jamás peca, pero entendiendo esto, debe asumir su responsabilidad reconociendo su falta y pidiendo a Dios que lo perdone.
Hoy podemos ver que gran parte de los que dicen que no pueden dejar de hacer esto o aquello que desagrada a Dios, porque es una atadura. Cuando en realidad fue que se determinaron a ceder a la tentación. Pero ¿a qué estamos determinados nosotros? ¿Qué está a nuestra puerta? Recordemos que cada uno de nosotros es tentado conforme a sus propios deseos, Santiago 1:13-15.
Debemos creer que como le fue dicho a Caín que tenía dominio sobre el pecado. También nosotros podemos tomar esta palabra, sabiendo que Dios no ha de permitir que alguien sea tentado más allá de sus fuerzas y siempre da la salida a las tentaciones. 1 Corintios 10:13. No solo eso sino que nos dio el poder al darnos su Espíritu Santo, que nunca nos deja solo, desechemos pues las excusas, que mayor es Dios que nos llamó y está en aquellos que han creído en él.
Conclusión
Es necesario que los creyentes de este tiempo se animen unos a otros, a determinarse a ser integro en cada área de su vida, sabiendo es bienaventurado el que soporta la tentación ya que después que todo acabe recibirá la corona de vida que Jesús tiene preparado para aquellos que le han sido fieles y han demostrado que le aman.
Amados tenemos el éxito y la victoria asegurada en esta batalla.
Que Dios te de fuerzas y te afirme en él.
© Elena Torres. Todos los derechos reservados.
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