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Mensajes Cristianos – Devocionales Cristianos
“…Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad…” Proverbios 16:32 (RVR)
Todos tenemos una personalidad que nos hace únicos, pero ciertamente hay cosas positivas y cosas por trabajar en ella. La Palabra nos enseña que aprender a dominar nuestras emociones es una gran virtud.
Cuando logramos controlar nuestras emociones entonces nuestras reacciones también quedarán gobernadas. Una emoción fuera de control puede llegar a ser muy destructiva porque sin duda generará una reacción expresada en palabras o acciones que no será para nada edificante. Por el contrario una buena emoción generará un fruto que será de deleite para todos. Es por esto que con mucha responsabilidad debemos enseñorearnos de las emociones negativas como lo enseña la Palabra.
No es saludable actuar por impulsos, es necesario aprender a controlar esa primera reacción. Cuando somos impulsivos de seguro terminaremos lastimando a las personas más queridas. Cuando actuamos locamente sin pensar podemos estar desperdiciando oportunidades valiosas y hasta perder negocios. Dar rienda suelta a las emociones es muy peligroso y riesgoso.
Piensa antes de actuar, razona tus respuestas, analiza todas aquellas situaciones donde tus reacciones te han llevado a empeorar las cosas: Es mejor tardarse en airarse, es mejor dominar las emociones que conquistar una ciudad… Así lo dice la Palabra.
Las emociones son buenas y necesarias porque nos ayudan a expresarnos, ellas le dan pasión y empuje a nuestra vida. Pero es necesario analizar cuáles de ellas son negativas y están destruyendo nuestra vida y nuestras relaciones interpersonales. La depresión, el temor, la ira, el rencor, la rabia, el enojo no son emociones que edifican tu vida. Ellas traen consecuencias sociales, emocionales, espirituales y hasta físicas.
Es necesario sacar lo mejor que hay en nosotros y decidir cambiar por nuestro propio bien y el de nuestra familia. Algunos aspectos para trabajar internamente y de manera consciente son:
- Aprende a ser más tolerante con las personas
- Refleja alegría con tu rostro y tus palabras
- Escucha a tu prójimo antes de contestar
- No alimentes pensamientos de temor, soledad o tristeza
- Pide a Dios que sane heridas de tu corazón y aprende a perdonar
- No tengas estados de ánimo cambiantes
- Sigue lo bueno y desecha lo malo
- No permitas que las circunstancias adversas cambien tu estado de ánimo
Estos tips que te llevan a actuar de mejor manera, y en Efesios 4:31-32 Dios nos recalca la importancia de desechar lo que no conviene y aprender a actuar con bondad y perdón: “Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”.
Vamos a pedir al Espíritu Santo para que nos de ese dominio propio, esa fuerza que necesitamos para actuar con la bondad, la mansedumbre y la paz que sólo Él nos puede dar.
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