Una libre elección

Predicas Cristianas

Predicas Cristianas Texto Biblico: Jeremías 17:1-5

Introducción

Una libre elección es la que pone el Señor frente nuestro en cada ocasión en que debemos confrontarnos con Su palabra. En cada ocasión en que debemos tomar una decisión que afectará nuestra relación con Él y nos significará un cambio profundo para nuestras vidas.

Pueblo rebelde

El pueblo de Israel, el pueblo escogido por Dios fue un pueblo rebelde en muchas ocasiones. La rebeldía del hombre la vemos desde Adán. Pero también vemos que el hombre puede hacer uso de su libre albedrío. El hombre pudo hacer su elección desde el principio. A pesar de que muchas veces hacemos uso de nuestro atributo, al darnos cuenta de que nos hemos equivocado, no queremos reconocerlo. Por esa razón, buscamos a quién culpar por nuestras propias faltas.

Adán usó su elección. Se equivocó comiendo del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal. Pero lejos de reconocer su propio error, culpó a Eva directamente. Como consecuencia, en forma indirecta, culpo a Dios mismo. “La mujer que me diste por compañera me dio del árbol” (Génesis 3:12).

Con cincel de hierro y punta de diamante

El pecado está escrito con cincel de hierro y punta de diamante en el corazón del hombre. Porque el corazón del hombre natural es mas duro que el granito, y allí queda grabado hasta que son perdonados por el Señor.

Muchas personas tienen dudas o dificultades en cuanto a la elección para salvación y vida eterna. ¿Por qué? Porque no comprenden, o no quieren reconocer sus propios pecados y su condición de muerte espiritual. Condición que adquirió el hombre por causa de la caída de Adán.

Por lo tanto, esas personas no alcanzan quizás a comprender su propia condición, porque al no asumir su estado de muerte en delitos y pecados (Efesios 2:1), no alcanzan a visualizar la necesidad de elegir; si no fuera por la elección y por la gracia que la acompaña, nadie sería salvo.

Pero Cristo murió por todos, y a todos debemos alcanzar con Su evangelio para que así puedan ejercitar su propia elección y ser salvo. “Para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia” (Romanos 3:22).

El pecado permanece

El pecado permanece si la entrega al Señor no es integral. La naturaleza humana es pecaminosa, “Sus hijos se acuerdan de sus altares y de sus imágenes de Asera” (vers. 2). La palabra nos habla de la idolatría, porque este pecado pasa de padres a hijos, y así está grabado en el corazón.

Los hijos se acuerdan de los altares e imágenes de idolatría de sus padres, y es por ello que está en nosotros, como padres, el deber de ejercitar la elección de destruir definitivamente toda relación con la naturaleza caída para que las siguientes generaciones no recuerden nada de ésta.

Y cuando hablamos de idolatría no solamente hablamos de los antecedentes católicos que pudieran haber en la familia, sino que también estamos hablando de la soberbia, del orgullo y del egocentrismo. Debido a que allí se está idolatrando al propio ego. “Jehová exalta a los humildes, Y humilla a los impíos hasta la tierra” (Salmos 147:6).

También estamos hablando de la codicia, de la avaricia y del egoísmo, porque en estos casos estamos adorando al dinero. “Porque el malo se jacta del deseo de su alma, Bendice al codicioso, y desprecia a Jehová” (Salmos 10:3). También estamos hablando también hablando del alcoholismo, del tabaquismo, de la drogadicción, etc. Porque estamos dejando el lugar de Dios a otra cosa.

No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar. Por tanto, amados míos, huid de la idolatría” (1 Corintios 10:13-14).

Tu eliges

Cada uno tiene la opción por delante, si no reconoces tu vieja naturaleza y arrancas todo rastro de pecado de tu vida, tu heredad corre peligro pues será entregada al pillaje. Todo aquello que te ha sido entregado lo perderás, porque el pecado produce una interrupción en la relación con el Señor.

Si no arrancamos la idolatría nos veremos privados de disfrutar de la gracia de Dios, y de sus bendiciones. Volveremos a ser esclavos del mundo. El pueblo de Judá sufrió un castigo físico a través de los setenta años de exilio babilónico. Pero lo mas duro es el castigo espiritual porque éste es eterno, es como un fuego que nunca se apaga. Pero la ira de Dios a sido satisfecha por el sacrificio de Cristo para todos aquellos que aman al Señor y tomaron acertadamente la opción de pertenecerle.

Decisión de salvación y vida eterna junto a Cristo

Si has tomado tu decisión de salvación y vida eterna junto a Cristo. Si has optado por consagrarte para el Señor y su obra, la ira de Dios ya no está sobre ti, y debes prepararte para disfrutar de sus bendiciones. Debes luchar por ellas y evitar de todas formas que el enemigo te las pueda arrebatar.

Pero debes aprender a confiar plenamente en el Señor. “Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová. Será como la retama en el desierto, y no verá cuando viene el bien, sino que morará en los sequedales en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada” (verss. 5-6).

Debes entender la necesidad de sacar la auto-confianza, saca el apoyo de tu propio brazo pues allí al final solamente encontrarás la fragilidad humana. El brazo fuerte, inamovible y que siempre te sustentará es el brazo poderoso de Dios.

El corazón

Dice el vers. 5Pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová”. El corazón que no está entregado realmente al Señor se aleja del Dios viviente a causa de su incredulidad. Aquellos que ponen su confianza en el hombre se apartan de hecho de Dios, a pesar que de labios pretenden acercarse. “Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado” (Isaías 29:13).

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Francisco Hernández
Sirviendo a Jesucristo desde hace más de 20 años. No soy pastor de una iglesia, pero me gusta estudiar la biblia y redactar mensajes cristianos para ser participe de la gran comision.

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