Predicas Cristianas
Predica de Hoy: Dios te ama
Predica de Hoy Texto Biblico: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16)
Introducción
En el libro de 1 Corintios en el capítulo del amor, el capítulo 13, nos dice que el amor permanece, el amor nunca deja de ser. También sabemos que Dios permanece para siempre. Si el amor permanece es porque Dios permanece, porque Dios es amor.
El más grande descubrimiento que una persona puede llegar a hacer es conocer ese amor eterno de Dios por nosotros. Dios nos ama con amor eterno y quiere que le conozcamos como Él es. En otro tiempo tal vez pensaríamos que esto era imposible pero ahora hemos venido al conocimiento del Señor.
1. Dios me ama
Cuando decimos que amamos a alguien lo hacemos cuando llegamos a conocer profundamente a la otra persona. La conocemos con sus virtudes y defectos, pero de igual manera en nuestro interior podemos sentir esa cercanía y cariño por el otro.
La biblia entera está llena de muestras del amor de Dios para con los seres humanos. Dios salvó al pueblo de Israel con poder y gran gloria. Los sacó de Egipto con milagros y maravillas, a pesar de los errores del pueblo.
Dios nos conoce a cada uno y a pesar de esto Él nos sigue amando. Aunque hayamos tenido una vida de pecado, Cristo murió por nosotros. En el capítulo dos del evangelio de Juan y versículos del 23 al 25 podemos leer que Jesús conocía a todos y no necesitaba que alguien le diera testimonio de las personas, pues Él conoce a todos.
Dios no cambia y sigue conociendo a cada uno de los seres humanos que habitamos este mundo. Es la omnisciencia de Dios. Se puede engañar a los demás pero a Dios nadie lo puede engañar.
Y aun con este conocimiento de nuestro pecado Dios decide amarnos. Fue tan grande su amor que envió a su unigénito a salvar al mundo.
La forma en que habría de salvar al mundo también fue una muestra de ese amor de Dios, pues el sufrimiento de Jesús fue en extremo grande. Podemos leer estos relatos en los cuatro evangelios y estremecen el corazón al conocer lo que padeció el Señor por amor a nosotros.