Predicas Cristianas
Prédica de Hoy: Cristo el fundamento
Predicas Cristianas Texto Bíblico: Filipenses 2:9-11
Introducción
A lo largo de los años en mi vida de fe, he visto y escuchado de tantas reformas personales que personas que profesaban una fe en algo y luego después de un encuentro con algo divino o con algo carnal cambian su perspectiva.
Conocí una mujer que tenía más de 10 años sirviendo a Dios, y un día llegaron unas personas con folletos hablándole de que el Espíritu Santo no existía y que el evangelio era una farsa.
Enseguida esa mujer empezó a botar todo lo que había creído en su corazón y negó su fe en el Señor llamando mentira el evangelio y lo que Dios había hecho en su vida. Que triste ¿Verdad? Ella a los dos años murió y su alma se perdió porque negó a aquel que la había salvado.
¿Te parece familiar ésta historia?. Precisamente hoy quiero hablarte acerca de los hijos de Dios que niegan su fe, y se van detrás de una secta, ésta vez “ El Judaísmo ”
Bases firmes, una fe firme
Cuando hablamos de una secta nos referimos en este caso a una organización religiosa en dónde se imparten verdades bíblicas envueltas en doctrinas de falsas de hombres sin ningún fundamento bíblico. Por lo tanto muchas personas débiles en la fe caen fácilmente.
Con preocupación he visto a hombres y mujeres a quien Dios les ha bendecido tanto y los ha cambiado para su gloria y su honra. Y de un día para otro reniegan de su fe, y se convierten al judaísmo negando todo lo que habían aprendido anteriormente.
El judaísmo vs Cristianismo
El Judaísmo y el Cristianismo comparten las mismas raíces teológicas . Ambas profesan creer en Dios, y que Él es quien dice que es: omnipotente, omnisciente, amoroso, justo y misericordioso, que Dios es el creador y sustentador del universo. Todo se lee muy bonito ¿verdad? Pero en ésta secta creen en la palabra de Dios con la exclusión del Nuevo Testamento.
En el Nuevo Testamento es dónde precisamente se centra nuestra fe, porque habla de la vida y ministerio de Jesús y el nacimiento de su iglesia amada.
El judaísmo no cree que Cristo vino a este mundo como el Mesías, negando su divinidad, y que no vino para redimir al pueblo de Dios, y ellos en su error aún el día de hoy están esperando la venida del Mesías como lo dice el profeta Isaías.
Además, los seguidores del Judaísmo no creen que el Mesías prometido vendrá a salvar al mundo de la carga del pecado. (Isaías 53) En cambio, creen que el Mesías será un hombre enviado por Dios para restaurar la nación de Israel y traer la paz al mundo por medio de la fuerza y así destruir a todos sus enemigos. Esto fue, de hecho, lo que los judíos en los días de Jesús esperaban de Jesús. Pero en Juan 18:36 Cristo afirmó: “mi reino no es de éste mundo”.
Cuando Jesús entró en Jerusalén en un burro justo una semana antes de su crucifixión, lo aclamaron como un héroe militar que los salvaría de la ocupación romana. Cuando rápidamente se dieron cuenta de que Jesús no iba a hacer esto, se volvieron contra él, llamándolo blasfemo. ¿Por qué? Porque ellos querían era un rey político y no a un salvador redentor. Por eso la biblia dice: a lo suyo vino, y los suyos no le recibieron (Juan 1:11-12).
De hecho, después de que Jesús fue levantado de entre los muertos y se apareció a sus seguidores, muchos judíos se negaron a creer en la resurrección y afirmaron que los discípulos de Jesús habían robado su cuerpo como una forma de engañar a la gente haciéndoles creer que Jesús había resucitado.
Hoy en día, muchos judíos reconocen que Jesús fue un gran maestro y tal vez incluso un profeta. Pero se aferran a la creencia de que Jesús no era más que un hombre, y ciertamente no era Dios mismo.
Amado hermano(a) se da cuenta lo errado que están acerca de la fuente de nuestra fe que es Cristo mismo.
La base de nuestra fe se basa en la persona, muerte y resurrección de Jesucristo. Nosotros creemos que Jesús es uno con Dios (Juan 1: 1), y se hizo hombre para restaurar la brecha existente entre Dios y la relación del hombre que ocurrió como resultado de la caída (Juan 1: 14).
Los nacidos de nuevo confiamos en la muerte y resurrección de Jesús como el único pago por el pecado que separa al hombre de Dios, y creen que solo la fe en Cristo y su obra puede limpiarnos de nuestro pecado (Juan 14: 6). Amén
En el Judaísmo no se acepta el Nuevo Testamento como Escritura inspirada por Dios, pero toda la escritura es inspirada por Dios (2 Timoteo 3:16). A pesar de que ellos lo nieguen, hay muchas referencias a Jesucristo en el Antiguo Testamento y una serie de profecías que Él personalmente cumplió. Isaías 53, también llamado “El Siervo Sufriente”, es una descripción perfecta de la persona de Jesús, así como de sus pruebas y crucifixión. El Salmo 22: 14-18 también describe la crucifixión de Jesús con gran detalle.
Conclusión
La fuente de nuestra fe es Cristo mismo el hijo Dios, si negamos que creemos en Él, estamos poniendo su sacrificio en la cruz en vano.
¡Abre tus ojos! Y no caigas en errores doctrinales, no te dejes engañar por el enemigo haciéndote creer que Jesús no es Dios. Lee tu Biblia y te darás cuenta que Cristo es la base de todo fundamento.
Hay que destacar que no todos los judíos rechazan la verdad de Jesús. Hay muchos judíos que ponen su fe en Cristo, los “judíos mesiánicos”. De hecho, el apóstol Pablo mismo fue un judío devoto que persiguió a aquellos que predicaron el evangelio de Jesucristo.
Pero después de experimentar una visión de Jesús, se hizo cristiano y predicó la crucifixión y la resurrección a miles de personas, tanto judíos como gentiles.
¡Que tú fe esté fundamentada en Cristo Jesús y no en Los hombres!
Buenos días y Bendiciones.
© José R. Hernández. Todos los derechos reservados.
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