Predicas Cristianas
Predicas Cristianas Predica de Hoy: Lecciones del Salmo 37: confiando en Dios en medio de la adversidad
Predicas Cristianas Lectura Bíblica de Hoy: Salmo 37
Introducción:
El Salmo 37 es uno de los Salmos de David que nos ofrece sabiduría y aliento en tiempos difíciles. A lo largo de este Salmo, David nos enseña a confiar en Dios y a no preocuparnos por los malvados que parecen prosperar.
En esta predicación, exploraremos la historia detrás del Salmo 37 y las lecciones valiosas que podemos aplicar en nuestras vidas y en la iglesia de hoy, utilizando la versión Reina-Valera 1960 de la Biblia.
I. Contexto histórico del Salmo 37
A. David, el autor del Salmo 37, enfrentó muchos desafíos y adversidades a lo largo de su vida.
B. A pesar de sus dificultades, David confió en Dios y se convirtió en el rey de Israel y un hombre conforme al corazón de Dios.
C. El Salmo 37 fue escrito como una respuesta a la aparente prosperidad de los malvados y como un recordatorio de confiar en Dios en medio de la adversidad.
II. No preocuparse por los malvados que prosperan (Salmo 37:1-2)
A. Versículos clave: Salmo 37:1-2 (RVR1960)
“No te impacientes a causa de los malignos, ni tengas envidia de los que hacen iniquidad. Porque como hierba serán pronto cortados, y como la hierba verde se secarán.“
B. La tentación de preocuparnos por aquellos que parecen tener éxito a pesar de sus malas acciones.
C. La importancia de recordar que la prosperidad de los malvados es temporal y que Dios finalmente los juzgará.
III. Confiar en Dios y hacer el bien (Salmo 37:3-6)
A. Versículos clave: Salmo 37:3-6 (RVR1960)
“Confía en Jehová, y haz el bien; y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, y tu derecho como el mediodía.“
B. La importancia de confiar en Dios en lugar de preocuparnos por las acciones de los malvados.
C. Hacer el bien y deleitarnos en Dios nos brinda paz y satisfacción en medio de la adversidad.
IV. Ser pacientes y esperar en Dios (Salmo 37:7-9)
A. Versículos clave: Salmo 37:7-9 (RVR1960)
“Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, por el hombre que hace maldades. Deja la ira, y desecha el enojo; no te excites en manera alguna a hacer lo malo. Porque los malignos serán destruidos, pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra.“
B. La importancia de tener paciencia y esperar en Dios en lugar de dejarnos llevar por la ira y el enojo.
C. La promesa de que Dios recompensará a aquellos que confían en Él y esperan en Su justicia.
V. La bendición de los justos y el juicio de los malvados (Salmo 37:10-13)
A. Versículos clave: Salmo 37:10-13 (RVR1960)
“Pues de aquí a poco no existirá el malvado; aunque mires su lugar, no estará allí. Pero los mansos heredarán la tierra, y se recrearán con abundancia de paz. Maquina el impío contra el justo, y cruje contra él sus dientes. El Señor se reirá de él; porque ve que viene su día.“
B. Dios bendice a aquellos que siguen Sus caminos y juzga a los malvados.
C. La confianza en que Dios está en control y que Su justicia prevalecerá.
VI. Conclusión: Lecciones del Salmo 37 para la iglesia de hoy
A. No debemos preocuparnos por los malvados que parecen prosperar, sino enfocarnos en confiar en Dios y hacer el bien.
B. La importancia de ser pacientes y esperar en Dios en medio de la adversidad.
C. La confianza en que Dios bendice a los justos y juzga a los malvados, y que Su justicia prevalecerá.
En resumen, el Salmo 37 de David nos enseña valiosas lecciones sobre cómo enfrentar la adversidad en nuestras vidas y en la iglesia de hoy. Al confiar en Dios, hacer el bien, ser pacientes y esperar en Él, podemos superar los desafíos y experimentar la paz y la bendición que vienen de seguir Sus caminos. A medida que aplicamos estas lecciones en nuestra vida diaria, nos acercamos más a Dios y nos fortalecemos en nuestra fe.
© Francisco Herández. Todos los derechos reservados.