Reflexiones Cristianas
El mundo ha sufrido muchos cambios, la tecnología se ha desarrollado a gran escala, la ciencia se aumentado, las mega construcciones revelan un futuro prospero, las edificaciones y muchos progresos técnicos aseguran de este mundo un lugar de avances tecnológicos.
Esta es la visión desde el punto de vista físico y social del hombre. Si yo le preguntare en estos momentos ¿Cómo ve usted los tiempos, que respondería? Usted me diría están bien, otros son malos, otros los veo igual.
La Biblia nos advierte de los últimos tiempos, la visión humana es tan corta que solo nos limitamos a ver el progreso material y económico, pero dejamos el más importante lo espiritual. El Apóstol Pablo a la iglesia de tesalónica le dice esto:
1 Tesalonicenses 5:1 “Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba“.
Día tras día, hemos oído, visto y hemos leído de predicadores, pastores en nuestras iglesias, evangelistas, que se han referido a este tema en particular. Los tiempos. Pablo hace referencia a que ya no hay necesidad de hablar del tiempo actual, ni yo les voy hablar del tiempo en que vivimos, porque usted mismo se está dando de cuenta que son malos.
A pesar que los gobiernos hablen de que todo cambiara, déjeme decirle una cosa que los tiempos no van a cambiar porque esto está escrito en la palabra de Dios, lo que el creyente espera es el rapto de la Iglesia, y mientras las personas esperan paz mundial, que la economía se arregle, que los salarios suban, los valores de este mundo van decayendo poco a poco.
Tenemos un índice de valores por el suelo, lastimosamente estamos viviendo una era tan tecnológica que ya las conversaciones se están desapareciendo gracias al Whatsapp, no que sea malo, pero veo un grupo de personas y todos pegados de su celular, que me dice eso.
Los tiempos han cambiado, pero que además los tiempos y los cambios nos están señalando que toda esta llegando a su final.
No hay necesidad que yo le diga cómo ve usted los tiempos, porque si usted responde que están malos, yo le contestaría. Entonces que está usted haciendo. Nosotros como Iglesia en que estamos ocupando nuestro tiempo. Efesios 5:16 “aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos“.
Al decir los días son malos Pablo laza su sentido de urgencia debido a lo sutil que es lo malo. La palabra de Dios nos está diciendo que es hora de levantarnos del sueño que distingamos los tiempos que veamos las señales que los tiempos lanzan para prepararnos.
Efesios 5:14 “Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo“.
La Iglesia está en un estado de retardo hoy en día, hay un durmimiento mortal, todos estamos tranquilos con los que tenemos, no hay preocupación, y mientras la Iglesia sigue durmiendo el enemigo avanza.
La Biblia habla de dos sueños, el sueño espiritual y el sueño físico (muerte) pero para nosotros que estamos vivos es el sueño espiritual, estamos vivos físicamente pero muertos espiritualmente.
Necesitamos este mismo sentido de urgencia que tenis el apóstol Pablo porque también nuestros días son malos. Debemos mantener nuestras normas en alto, actuar sabiamente, hacer lo bueno, tanto como sea posible.
Fijémonos como andamos, fijémonos como hablamos, fijémonos como vestimos. Ya no hay tiempo para dormir debemos despertar del sueño que Satanás a puesto en las iglesias del mundo, el quiere que la iglesia permanezca así para el poder atacar.
Por lo cual dice, y esta es una alerta para cada uno de nosotros por lo cual dice y donde lo dice lo dice el Señor. Romanos 13:11 “Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos“.
Ya no hay razón para decirle como están los tiempos, ustedes mismos saben lo están viviendo, pero si puedo decirles que podemos despertar, comenzar a orar, a ayunar mas, predicar la palabra a nuestros amigos, vecinos, esto es aprovechar el tiempo. Y porque la Biblia nos dice esta alerta porque dice la Biblia:
1 Tesalonicenses 5:2 “Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche“
Los intentos de adivinar la venida del Señor han sido un fracaso mundial, pues la Biblia dice que nadie de nosotros sabe la hora en que el vendrá, pero si la palabra nos dice como debemos estar 1 Tesalonicenses 5:6 “Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios“.
Jesús no les dijo a sus discípulos cuando vendría pero si los exhortó a velar, a estar preparados, pendientes, alerta, Marcos 13:33 “Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo“.
Nadie sabe cuando esto ocurrirá pero lo que si estoy seguro es que tenemos que estar preparados para ese día. Mateo 25:13 “Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir“.
Hermanos ya es hora de levantarnos del sueño, miren los cielos, miren a su alrededor ¿no nos hablan los tiempos en que estamos? Todo a nuestro alrededor nos habla, el tiempo nos está diciendo que el señor esta pronto a venir, pero como nos encontrara cuando venga Lucas 18:8 “Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?“
Estamos viviendo en la dispensación de la gracia, estamos viviendo tiempo extras, aprovechémoslo busquemos mas del Señor, oremos mas, ayunemos para que las almas vengan a Cristo, no nos quedemos solo en templos salgamos de esas cuatro paredes y hablemos a las personas de Cristo no nos pongamos a acumulara cosas materiales porque todo eso perecerá, busquemos las celestiales y digámosle a la personas que Cristo pago el precio de nuestra salvación y despertemos.
Oremos por un avivamiento en nuestras iglesias, un despertar un interés por la palabra de Dios eso es lo que Dios quiere. Ezequiel 22:30 “Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé“.
Dios espera de nosotros que nos pongamos en lista de batalla, en primera fila, yo le aseguro que si la Iglesia buscara de lleno al Señor Dios haría milagros poderosos, pero como puede el espíritu santo trabajar con una iglesia muerta. Necesitamos de esa agua y solo esa verdadera agua la da Cristo.
© Juan Carlos Jimenez. Todos los derechos reservados.
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