Devocionales Cristianos – Una oración con calidad

Reflexiones Cristianas

“…Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá…” (Mateo 7:7)

Siendo honesto, en mis oraciones, sobre todo, pido. Entre otras cosas, ruego por el amor de mi familia, una salud estable, el éxito en el trabajo, el pan cotidiano.

Pido también todo lo que no deseo en mi vida, como no caer en desgracia, causar mal a otras personas, ser olvidado por mis seres queridos. Pidiendo, me siento seguro y humilde porque reconozco que no soy capaz de hacerlo todo por mi cuenta, sino que Dios intercede por mí.

Pero la tarea no termina ahí. Porque su palabra nos alienta a ir en busca de lo que queremos encontrar. Porque si nuestro padre vive en nosotros, entonces Él obra por nosotros y puede hacer posible lo que imploramos.

Si queremos ser amados, entonces podemos ir en busca del amor, amando, o si pedimos protección, podemos comenzar por cuidar nuestra integridad física y espiritual, cuidándonos. Es como una alianza espiritual entre el padre que nos inspira con su espíritu, y nosotros sus hijos, que permitimos que los dones espirituales hagan efecto positivo en nuestras vidas.

Él obra a través de otras personas también. Un prójimo santificado puede muchas veces ser el mejor guía cuando nosotros estamos en riesgo de peligros. Un consejo sabio de nuestra esposa, padres, amigos verdaderos o hermanos en la fe muchas veces nos salvan, literalmente, el pellejo, sobre todo cuando nos ponemos obstinados en hacer lo opuesto a nuestras oraciones, como no cuidar la salud, por ejemplo.

También pienso que es muy justo reconocer esto: Jehová, es nuestro padre, no un genio que concede deseos. Porque en muchas ocasiones me pongo solo a pedir y pedir olvidándome de alabar, agradecer, interceder y comprometerme.

Por eso, es mi anhelo que mis oraciones tengan un espacio para la alabanza y gratitud hacia mi padre, porque siempre habrá motivos para elevarle loores y agradecimientos: un día de sol radiante, un día de lluvia fresca, la sonrisa de tus hijos, estar vivos… sabemos que la lista podría no tener fin.

Y también deseo que mi corazón y mis labios intercedan por mi prójimo antes que por mí mismo. Pues, preocupándome por el bienestar y la alegría de los que me rodean demuestro que quiero alcanzar a ser un cristiano comprometido.

De hecho, comprometerse en oración podría ser lo más difícil de hacer. Confesar que queremos entregarnos a la voluntad de nuestro padre, para que Él nos moldee a su voluntad es un gran desafío contra nuestro propio yo. Y sin embargo, mejoremos en ese aspecto también, clamando con fe y determinación que su voluntad divina se manifieste en todos nosotros.

© Predicas Biblicas. Todos los derechos reservados.

Predicas Biblicas… Reflexiones Cristianas

author avatar
Predicas Biblicas
Predicas Biblicas un central de sermones cristianos dedicado a evangelizar a las naciones a través de predicas cristianas, estudios biblicos, y mensajes cristianos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio