Si alguno tiene falta de sabiduría, pídala a Dios

Mensajes Cristianos – Predicas Cristianas

«…Y si alguno de vosotros le falta sabiduría, pídala a Dios, quien da a todos con liberalidad y sin reprochar; y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada. Porque el que duda es semejante a una ola del mar movida por el viento y echada de un lado a otro…» (Santiago 1:5-6)

Hay muchas conductas que Dios ha establecido claramente para los cristianos. Sabemos que robar, matar, adulterar y mentir (entre otras) son acciones que quebrantan los mandamientos de Dios y nos ubica en el árido y escabroso terreno del pecado.

A medida en que vamos conociendo poco a poco, a mayor profundidad, las riquezas contenidas en la Palabra de Dios, nos damos cuenta de que la conducta diaria de los seguidores de Jesús, no se limita a los diez mandamientos que Dios le dio a Moisés, sino que Jesús exige de nosotros una entrega total y absoluta en todas y cada una de las áreas de nuestras vidas.

Comenzamos adorando a Dios en las iglesias, y descubrimos que la adoración es un acto diario que realizamos en el trabajo, en el hogar, en el supermercado. En ese momento, Dios abre nuestro entendimiento para que podamos comprender que honramos a Dios en todas y cada una de las decisiones que tomamos y que hagamos lo que hagamos, todo debemos hacerlo para Su Gloria.

La dificultad se nos presenta cuando tenemos que tomar decisiones que no están tan claramente detalladas en la Palabra de Dios, surgen en nuestras vidas preguntas como ¿este trabajo me conviene? ¿Con quién me casaré? ¿Esta ropa es adecuada? Preguntas y más preguntas sobre decisiones que a diario debemos tomar.

Pablo enfatiza la importancia que tienen las pequeñas decisiones en nuestras vidas, por el peso que marcarán para la eternidad.

Pablo hace una analogía con acciones que podríamos llamar “superfluas”, “pequeñas” o “insignificantes” para hacernos ver la importante que es hacer todo para la gloria de Dios:

«…Por tanto, ya sea que comáis o bebáis, o que hagáis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios…» (1 Corintios 10:31)

Ante cualquier decisión que usted deba tomar, lo primero que debe saber es que hasta lo más mínimo debe hacerlo para la gloria de Dios, de lo contrario, usted está deshonrando a Dios.

Pongamos un ejemplo extremo: Supongamos que usted está trabajando en la iglesia para evangelizar, o está en el ministerio de niños, o quizá usted trabaja para el ministerio de la tercera edad, pero lo hace para que los demás lo vean, es decir, para gloriarse usted mismo, y en su actividad “buena” no tiene la intención de corazón de glorificar a Dios. Por más “bondadosa” que sea su conducta, verdaderamente no está honrando a Dios con su conducta.

Así que la primera pregunta que usted debe hacerse antes de tomar una decisión es: ¿con mi decisión glorifico a Dios?

Ahora bien, antes de tomar una decisión, es muy importante que usted le pida sabiduría a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproches. Como lo muestra Santiago, esa petición debe ser hecha con fe, sabiendo que Dios nos oye y atiende a nuestras súplicas.

La sabiduría que viene del cielo, en combinación con el conocimiento de la Palabra de Dios, nos dará el discernimiento suficiente para saber si, por ejemplo, el trabajo que nos están ofreciendo honra a Dios o lo contrario; sabremos si la persona con la que nos queremos casar es la idónea; y sabremos si la vestimenta es decente y adecuada para un siervo de Dios.

Dios nos insta a pedirle sabiduría para tomar nuestras decisiones, así, Él se llevará toda la honra y toda la Gloria por los siglos de los siglos. Amén.

© Flor Karina Zambrano Franco. Todos los derechos reservados.

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Flor Karina Zambrano Franco

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