La ansiedad apaga nuestra fe

Bosquejos Biblicos

Texto base: Mateo 6:25-34

En el tiempo de ahora, el correr por preocupaciones y compromisos es más común que antes, esto también por el hecho de que el mundo se mueve más fácil y rápido, y las cosas se deben hacer más efectivas y más rápidas del mismo modo “si se quiere ser competente” claro… o “tener todo bajo control”.

Sin embargo debemos tener en cuenta que este mundo es regido por el príncipe de este mundo, Satanás (Juan 12:31),  y es así como él quiere que perdamos la fe y la confianza en Dios quien es quien vela por nosotros.

Ahora, somos seres humanos y vivimos en este mundo; y aun así debemos vivir y hacer cosas para salir adelante,  y todo lo que respecta a las responsabilidades y demás deberes que adquirimos, entonces como no sentir ansiedad en momentos cuando llega un servicio público que se pude cancelar por falta de dinero, o cuando hay hijos que alimentar y de repente le han pedido su carta de renuncia en el trabajo, o en momentos cuando una enfermedad ataca nuestro cuerpo o el cuerpo de alguien que amamos… ¿Cómo no angustiarse?

Bien, Jesús nos enseña que la ansiedad es perjudicial para nuestra fe, y que este es un acto exclusivo de aquellos que no confían en el cuidado de Dios, aun así en medio de tanta tempestad no queremos ser llamados “hombres de poca fe” (Mateo 8:26).

Veamos algunos puntos que nos ayudaran a entender porque no deberíamos sentir ansiedad.

1. La ansiedad es una pérdida de fuerzas innecesaria: En el versículo 27 del texto base, Jesús nos dice que por más que nos sintamos ansiosos nunca podríamos ser un poco más altos de lo que somos, esta es una muestra sencilla de la fuerza que uno hace de manera innecesaria al enfrentarse a alguna situación que causa ansiedad.

Un ejemplo de ahora es cuando de repente se encuentra usted frente a una situación que le hace dudar de la fidelidad de Dios, como la pérdida de su trabajo, ¿Acaso por más que se afane usted lograría retener este empleo? Es la misma pregunta frente a todas las situaciones, además la ansiedad le quiere robar sus fuerzas.

2. La ansiedad es propia de los que no conocen a Dios: Si, en el versículo 32 de nuestro texto base, Jesús nos dice que estas preocupaciones son propias de los gentiles; tengamos en cuenta que los gentiles en este contexto son las personas no Judías del momento, y ellos aparte de no conocer a Dios eran idolatras y se preocupaban por lo que necesitaban en su vida en ese momento.

Hay veces que caemos en ansiedad porque no permitimos que Dios tome en control de todas las áreas de nuestra vida, y es ahí donde Él quiere que confiemos y no actuemos como los que no le conocen.

3. La ansiedad es un exceso de pensar en el futuro: Así es, en el versículo 34 del texto base nos da la luz a este punto. Jesús más claro no pudo ser al decirnos en su palabra que no debemos afanarnos por lo que aún no hemos vivido, puesto que cada día trae su propio afán.

4. La ansiedad apaga nuestra fe: Este punto reúne los tres anteriores, ya que cada vez que dudamos de Dios, damos libertad a nuestras propias maneras de vivir y dejamos que la duda e incredulidad gobierne nuestro ser.

En el versículo 30 del texto base Jesús dice que la hierba del campo que hoy es mañana no sería cuando se hecha al horno, pero Dios la vistió durante su vida ¡hombres de poca fe!

Esto es bastante claro e inquietante, ya que nosotros somos hijos de Dios y debemos creer y confiar en nuestro Padre celestial a pesar de que la situación sea contraria a lo prometido por Él en este pasaje. 

Para concluir debemos estar atentos en nuestro interior a las palabras de Jesús escritas en este pasaje, creer y confiar que en todo momento Él está al cuidado de nosotros, y que nosotros debemos es vivir agradándole a Él.

 © José R. Hernández. Todos los derechos reservados.

 Predicas Biblicas… Bosquejos para Predicar

author avatar
Predicas Biblicas
Predicas Biblicas un central de sermones cristianos dedicado a evangelizar a las naciones a través de predicas cristianas, estudios biblicos, y mensajes cristianos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio