Bosquejos Bíblicos
Bosquejos Bíblicos Predica de Hoy: La verdadera contaminación
Bosquejo Bíblico Texto: 2 Corintios 7:1
Introducción
En un mundo preocupado por la contaminación ambiental y sus efectos, es esencial reflexionar sobre otra forma de contaminación: la espiritual. Así como cuidamos nuestro planeta, es crucial limpiar nuestro ser interior de aquello que nos aleja de Dios. Hoy, exploraremos lo que realmente nos contamina y cómo podemos perfeccionar la santidad en el temor de Dios.
I. La perspectiva equivocada de los fariseos (Marcos 7:1-23)
Los fariseos se concentraban en la limpieza externa, creyendo que esto los mantenía puros. Sin embargo, Jesús les enseñó que la verdadera contaminación no viene de lo externo, sino de lo que emerge de nuestro corazón.
- a. Ignorando el corazón (vers. 6)
- b. Enfocados en lo superficial (vers. 8)
- c. La crítica de Jesús (vers. 9)
II. Lo que realmente nos contamina (Marcos 7:20-23)
Jesús aclara que lo que contamina al hombre proviene de su interior: los pensamientos y acciones pecaminosas que emergen de nuestro corazón.
- a. Origen de la contaminación (vers. 20)
- b. Ejemplos de contaminación interna (verss. 21-22)
- c. La responsabilidad personal (vers. 23)
III. La pureza del corazón y la vida en santidad (2 Corintios 7:1)
El llamado a la santidad es un llamado a purificar tanto el cuerpo como el espíritu, guiados por el temor reverente a Dios.
- a. Limpiarnos de toda contaminación (vers. 1a)
- b. Perfeccionando la santidad (vers. 1b)
- c. El temor de Dios (vers. 1c)
Aplicación
Cada día nos enfrentamos a decisiones que pueden contaminar nuestro espíritu o purificarlo. ¿Cómo estamos permitiendo que nuestras acciones y palabras reflejen la santidad a la que Dios nos llama?
Conclusión
Reconocer la verdadera fuente de contaminación en nuestras vidas es el primer paso hacia una vida de santidad. Al enfocarnos en purificar nuestro corazón y no solo en acciones externas, podemos vivir de manera que honremos a Dios en todo lo que hacemos.
© Sebastian Romero. Todos los derechos reservados.