Bosquejos Bíblicos
Predica de hoy: ¡No te duermas!
Texto bíblico principal: “Y vino luego a sus discípulos, y los hallo durmiendo, y dijo a Pedro: ¿Así que no habéis podido velar conmigo una hora?” Mateo 26:40
Introducción
Jesús encontró a sus discípulos durmiendo cuando estaba a punto de ser entregado en manos de pecadores. Dice en nuestro texto bíblico que los discípulos no pudieron orar ni siquiera una hora y le dijo a Pedro, ¿no has podido velar conmigo una hora?
Aun sabiendo sus discípulos que venía el tiempo difícil en el que su maestro iba a morir, y aun sabiendo eso se durmieron y no velaron junto con Él. A veces nosotros somos como Pedro y los discípulos en ese sentido. En el sentido que sacamos tiempo para todas las cosas, pero cuando vamos a sacar tiempo para Dios nos dormimos, nos da pereza, o le dedicamos de las sobras de nuestro día.
Sabiendo que el padre te da 24 horas al día, terminas la mayoría de las veces ofreciendo solo tus sobras, o en un peor caso ni siquiera lo buscas.
¿Qué pasa cuando no lo buscamos y nos dormimos? Vienen ataques del enemigo porque le estamos dando vía libren para que el entre y haga de las suyas con nosotros.
I. No te duermas, combate
“Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad esta dispuesto, pero la carne es débil” Mateo 26:41
Tenemos que dejar de dormir y empezar a combatir aun con eso que aun no ha venido a nuestras vidas. Podría suponer que los discípulos no tenían ni idea de que Jesús iba a ser entregado, y de que debían apoyarlo en oración.
La oración nos ayuda para combatir la tentación. Jesús nos enseña que nuestro espíritu esta dispuesto, pero aun nuestra carne es débil, y díganme o piensen ustedes si nos dormimos ¿Cómo vamos a combatir?
A veces es necesario vencer el sueño y el cansancio y orar por ti, porque tu no sabes que esta planeando Satanás contra ti. Pero si sabes que él no pierde el tiempo para hacerte mal, y Satanás no duerme.
Es necesario que dejes de dormir y empieces a orar por los demás, porque no sabes si están pasando por momentos difícil, si tienen pensamientos de suicidio, o sentimientos de depresión y tu oración puede contribuir a que eso cambie.
No te digo que no debes dormir, claro que debes dormir; pero del adormecimiento que hablo es espiritual. Es cuando se duerme tu espíritu, tu corazón, y tu deseo por buscar de Dios. No puedes dormirte en ese ámbito de tu vida, más bien todo el día debes despertar ese espíritu que Jesús te ha dado y combatir.
Es hora de que nos levantemos y empecemos a combatir, ayunar, orar en las madrugadas, para si ser esos guerreros que esta buscando nuestro Padre, los discípulos aprendieron que era necesario estar despiertos, porque de esa forma hay victorias en la guerra.
II. No te duermas – Si Dios busca, que nos encuentre
“Y dejándolos, se fue de nuevo, y oro por tercera vez, diciendo las mismas palabras” Mateo 26:44
Jesús velo y oro, pero ¿Cuántas veces los encontró durmiendo? Tres veces, los encontró tres veces durmiendo. Así pasa en nuestra vida cotidianamente Él nos busca varias veces, pero quizás en todas esas veces que nos busca en ninguna nos encuentra, no encuentra nuestra disposición para hablar con Él, ni para que Él nos hable.
Debemos tener cuidado porque en la tierra siempre van a haber cosas que nos van a querer dormir para que no busquemos a Dios. El adormecimiento puede ser de diferentes maneras como:
El estrés, el trabajo al cual le dedicamos bastante tiempo y al final del día solo queremos dormir. El estudio que pasa casi exactamente igual que el trabajo, con las redes sociales que nos hace perder la mayoría de nuestro tiempo, entre muchísimas cosas más.
Otro ejemplo fueron las diez vírgenes, cinco de ellas estuvieron atentas a que el esposo llegara y cinco de ellas se durmieron en conseguir el aceite, se confiaron y cuando llego el esposo ellas no se encontraban y solo el esposo se quedo con las cinco que estaban atentas y preparadas esperando a su amado, que hermoso, debemos estar preparados como las cinco vírgenes que Jesús cuando venga por su pueblo estemos atentos para recibirle. Aleluya.
III. Que tu corazón no se duerma
“Entonces vino a sus discípulos y les dijo: Dormid ya, y descansad. He aquí ha llegado la hora, y el hijo del hombre es entregado en manos de pecadores” Mateo 26:45
Jesús nos entiende en todo, porque Él fue hombre igual que nosotros. Él también estuvo cansado, también tuvo miedo, también fue tentado, e incluso también tuvo sueño. Pero nunca en la biblia habla de que Él haya dejado a un lado su relación con Dios Padre. Sabemos que siempre alimento su relación con Dios y lo puso en su vida, sobre todo.
Así que hermanos Él te deja dormir si toca a tu puerta y no te encuentra o te encuentra durmiendo. Pero si eso pasa tú te haces responsable, si no quieres que eso pase mejor no duermas, y combate.
Conclusiones
Vela y Ora en todo tiempo para que cuando Dios te busque te encuentre haciendo su voluntad y no durmiendo como encontró a sus discípulos, y te pueda usar para su obra.
Vence el adormecimiento y demuestra tu amor por Dios y por tu prójimo. Estamos en estos tiempos que las personas que creemos y conocemos de nuestro Dios no podemos dormir, debemos estar firmes, despiertos, preparados, no dejando que nuestra carne nos vence.
Es importante que cuando Dios nos de una indicación lo hagamos que se sienta que somos personas merecedoras para estar en el reino de Dios.
Dígamele a la pereza, el sueño, los deleites carnales que no nos gobiernan y que somos mas que vencedores en cristo Jesús. Amen.
Redactado por Y.S. Parra Mora para el uso exclusivo de predicasbiblicas.com
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