Bosquejos para Predicar
Prédica de Hoy: Volando sobre la tormenta
Bosquejos para Predicar Lectura Bíblica de hoy: Habacuc 3:17-19
INTRODUCCIÓN:
Los aviones están hechos con la capacidad de resistir las turbulencias del aire cuando vuelan, las turbulencias están clasificadas del 1 al 6, los aviones pueden resistir turbulencias grado 6, pero no lo hacen.
Los pilotos han sido entrenados para leer las cartas meteorológicas y cuando ven que se aproxima una tormenta que puede golpear el avión, se elevan, vuelan por sobre las turbulencias más fuertes utilizando la potencia de sus turbinas.
Las águilas hacen lo mismo en las tormentas, su instinto les permite conocer cuando una tormenta se acerca, y aprovechando la fuerza de las corrientes de aire, abre las alas y se eleva por sobre la tormenta.
Nosotros los hijos de Dios al igual que los aviones y las águilas vamos encontrarnos en nuestra vida turbulencias muy fuertes que nos quieren derribar, tormentas fuertes que tienen la fuerza para derribarnos, y al igual que los aviones y las águilas podemos elevarnos, no físicamente, pero si espiritualmente, para que pase lo que pase en nuestra vida podamos andar siempre en nuestras alturas.
Muchos quizás en esta noche andamos volando bajo, no andamos en nuestras alturas sino en nuestras depresiones, en nuestros valles, en nuestras tristezas, quizás sentimos que hemos tocado fondo en nuestro problema, en nuestra condición, pero en esta noche el Señor por medio de su Palabra nos enseñara como elevarnos, como mantenernos en nuestras alturas a pesar de las tormentas de la vida, a pesar de las turbulencias que podamos vivir, en esta noche aprenderemos a mantenernos por la fe:
Levantados para Dios, aunque el enemigo nos quiera derribar con todas las fuerzas de sus vientos, de sus tormentas.
Habacuc escribió su profecía primeramente con mucha tristeza al ver la destrucción, el sufrimiento de su pueblo, su tierra estaba asolada, y comienza su libro con un reclamo a Dios (Habacuc 1:1-2) pero a medida que va hablando con Dios Él puede al final de su profecía elevarse en fe, elevarse en esperanza, Habacuc veía la realidad de lo que estaba pasando en su vida (Habacuc 3:17):