Bosquejos Bíblicos
Bosquejos Bíblicos Predica de Hoy: En busca de sanidad
Bosquejos para Predicar Texto Bíblico: 2 Reyes 5:9-19
Introducción
Hace días tuve una experiencia amarga de salud, y en medio de mi desespero el Señor me habló cuando realizaba mi devocional diario, y lo comparto contigo porque sé que a ti también Dios te hablará.
Sucede que muchas veces, (tal vez por mala costumbre) dejamos de último lo que a nuestra salud respecta (olvidando que somos morada y templo del Espíritu Santo de Dios), como si no fuese de gran importancia velar por nuestra salud física, en algunas ocasiones por salir del paso o para echar tierra a nuestra irresponsabilidad con nosotros mismos decimos “Dios me va a sanar”, ¡Amén!, yo estoy convencida de que Dios tiene el poder para hacerlo, pero hay algo que es muy importante y que nunca debemos olvidar.
Uno de los principios de la fe es “la acción” según Santiago 2:17.
Basándonos en el ejemplo de un hombre que padecía de lepra, (de seguro no se imagina lo terrible que es la lepra y todas las repercusiones que causa a la larga, es una enfermedad mortal), estudiemos los pasos a seguir cuando estamos en busca de sanidad.
I. Debemos actuar en fe (verss. 5-9)
a. Debemos tener fe en Dios aunque todo parezca imposible, Dios hace posible lo imposible (conforme a Su voluntad). Hebreos 11:1
b. Debemos confiar en el Señor, Él nos guiará. Proverbios 3:5-6
c. La fe genuina está ligada con la acción. Santiago 2:17
d. La desidia no aporta ningún beneficio, debemos ser diligentes. Proverbios 3:4
II. Debemos someternos a la soberanía de Dios, en humildad. (verss. 10-13)
a. Dios es soberano y obra conforme a perfecta voluntad. Job 5:9, Salmo 18:30
b. Dios no piensa como usted. Isaías 55:8-12
c. Ríndase ante Dios y atribuya a Él toda la gloria. Salmo 115:1
III. Obedezca a Dios y sea agradecido en todo momento (verss. 14-18)
a. De gracias a Dios por todo. 1 Tesalonicenses 5:18
b. Acepte la voluntad de Dios. Juan 5:30
c. Si usted obedece a Dios netamente, todo lo que haga le saldrá bien. Romanos 8:28
Conclusión
Es importante que un cristiano tenga fe y confianza en el Señor, pero además de eso también debe ser diligente, supongamos que usted está orando por un trabajo, y tiene la plena confianza en el Señor, a su tiempo Él se lo dará.
Pero así como oró sabe que le toca poner un poquitito de su parte (porque estamos conscientes de que lo que hacemos es nada, pero a veces creemos que hacemos demasiado), sentado de brazos cruzados en su habitación no recibirá nada, a menos que piense que el trabajo le caerá del cielo, lo único que debe hacer es ir a entregar los currículos, o las diligencias respectivas para postularse a un cargo a fin confiando en el Señor.
Lo que quiero decir mi querido hermano es que si está orando pidiendo a Dios que le bendiga en un área, (en este caso yo oraba por salud), debes poner de tu parte diligentemente, con Fe, humildad, y agradecimiento.
Recuerde que la voluntad de Dios no se cuestiona pues Él obra a su manera, obedezca a Dios en todo tiempo, y nunca olvide que sus designios son inescrutables.
Él desea lo mejor para usted, pero todo queda de su parte, ríndase ante Dios, para que aprenda a conocer su voluntad, aunque las cosas no parezcan tener sentido tenga la certeza de que Dios siempre tiene el control.
© José R. Hernández. Todos los derechos reservados.