Bosquejos para Predicar
Prédica de Hoy: Las promesas
Bosquejos para Predicar Lectura Bíblica de hoy: VERSICULO
Introducción:
Las promesas son obligaciones contraídas que comprometen a una persona a cumplirlas en un determinado momento (del futuro). Estas promesas generan expectativas en las personas, las cuales de ser validadas causan satisfacción y de ser ignoradas producen decepción y descrédito.
La palabra de Dios nos exhorta a no prometer en vano, más a ser responsables con nuestras palabras al momento de empeñar la palabra a alguien, más aún a Dios. De hecho, él nos ha hecho una gran promesa la cual Él no dejará de cumplir.
Desarrollo:
1. ¿Qué es una promesa?
a. La expresión de dar a alguien o realizar por esta persona algo en particular.
2. Tipos de promesa
a. Compromiso incondicional: Cuando el compromiso de cumplir algo no depende de lo que hagan los otros.
- i. Dios prometió no volver a enviar otro diluvio para destruir la tierra (Génesis 9:11) y lo ha cumplido al margen de cómo siga siendo la conducta de la humanidad.
b. Compromiso condicional: La promesa será posible siempre y cuando la otra parte ponga de su parte y cumpla con ciertas condiciones.
- i. La promesa de salvación por ejemplo es para aquellos que reciban a Jesucristo como su salvador (Romanos 10:10).
- ii. En Juan (1:9) la palabra de Dios nos recuerda que nuestro padre es fiel y justo con su promesa de perdón si nosotros confesamos nuestros pecados.
3. ¿Quiénes pueden prometer?
a. Toda persona está en su libre albedrío de prometer, aunque no todos están en las condiciones de cumplir con la palabra empeñada.
- i. Aquel que es consciente que comprometerse implica una responsabilidad mayor y obra coherentemente es una persona responsable.
- ii. Aquel que no cumple con sus compromisos es deshonesto y defrauda grandemente.
4. Testigos de una promesa
a. Cuando presenciamos el compromiso de alguien, nos convertimos en testigos de esa promesa.
- i. Testigos que dicen la verdad: Los apóstoles fueron los testigos directos de las promesas de Dios y de Jesucristo (Lucas 24:48-49)
- ii. Testigos que mienten, aquellos que dan falso testimonio de una promesa o hecho, como los falsos testigos contra Jesús, persuadidos por los principales sacerdotes. (Mateo 26:59)
5. ¿Cuál son las promesas del cielo?
a. El padre Celestial y Jesucristo eternamente cumplen sus promesas (Génesis 3:15); (Génesis 12:2-7); (2 Samuel 7:12,13,28); (2 Corintios 1:20); (Efesios 3:6)
b. La promesa del evangelio: desde Abraham hasta Juan el Bautista, todos los hombres temerosos de Dios guardaron la promesa de Dios de enviar al Mesías, lo cual cumplió (Lucas 2:25-34).
c. La promesa de su gracia: porque aun siendo pecadores Él nos ama y mediante Jesucristo, nos perdona nuestras faltas.
d. La promesa de Jesucristo: Prometió estar con nosotros todos los días hasta el fin del mundo (Mateo 28:20)
6. ¿Cuáles son nuestras promesas?
Nosotros también debemos ser capaces de cumplir con nuestros compromisos ante el padre
a. Mantener nuestra fe en Jesucristo: porque si queremos el galardón debemos atesorar este virtud divina.
b. Amarnos los unos a los otros: es el mandamiento divino que nosotros hemos aceptado una vez que confesamos que Jesús es nuestro salvador.
Conclusión:
En este bosquejo para predicar hemos abordado el tema la promesa, la cual se puede conceptuar como comprometernos a hacer algo por alguien. En nuestro caso, podemos como hijos de Dios, al aceptar a su hijo, nuestro señor Jesucristo, estamos comprometiéndonos ante el padre a amarnos los unos a los otros, y por lo tanto, también a amarlo a él porque él vive entre sus hijos.
De igual forma, si prometemos algo a nuestro prójimo, debemos ser muy responsables en cumplir nuestra palabra empeñada. Ahora bien, si somos testigos de alguna promesa, conviene que seamos honestos al testificar sobre la misma, porque de esa forma estamos actuando con rectitud, así como los discípulos de Jesucristo testificaron la verdad del evangelio una vez que Él subió a los cielos.
En resumen, el padre celestial y su hijo son el ejemplo más perfecto del cumplimiento de promesas a lo largo de toda la existencia de la humanidad y por ellos, también nosotros podemos perfeccionar nuestro obrar.
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