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Prédica de Hoy: Amor y fidelidad
Introducción:
“Gratitud, consagración, fidelidad y servicio son las verdaderas respuestas al infinito amor de Dios” (Autor: Diana de Chang).
Esta frase es una inspiración para expresar mi respuesta a tanto amor.
El amor hacia Dios es un amor lleno de fidelidad, un amor que busca acercamiento y comunión, un amor que lleva al servicio, un amor que implica un cambio de pensamiento de acuerdo a la norma de Dios, un amor que fluye espontáneamente. Un amor que lleva a servirle, a hablar constantemente de Él. Un amor que hace que Su palabra se talle en el corazón y en la mente.
“La gratitud se expresa, la consagración se nota, la fidelidad se demuestra y el servicio se disfruta”.
¿Qué habla tu boca: queja o gratitud y alabanza? ¿Qué refleja tu vida: consagración a Dios, fiel testimonio de su presencia en ti o una vida ligera? ¿Demuestras fidelidad en todas las áreas de tu vida? ¿Y qué del servicio: Disfrutas servir a Dios o es una carga demasiado pesada?
Jamás amar a Dios puede ser una pesada carga, el amor no es peso ni obligación, es un fluir que surge con espontaneidad porque mi corazón queda unido de tal manera que no puede dejar de amar.
Amar a Dios es un deleite, serle fiel es un fluir y servirle una gran pasión.
I. MIS VICTORIAS DEPENDEN DE MI FIDELIDAD A DIOS
En Deuteronomio 28:1-14, Moisés recuerda al pueblo de Dios no sólo el mandato sino enseña que las victorias y las bendiciones dependen de la fidelidad a Dios. “…te he dado a elegir entre la vida y la muerte, entre la bendición y la maldición…” (Deuteronomio 30:19).
Tus victorias y tus bendiciones dependen de tu fidelidad a Dios. Lo dice su palabra: Si obedeces vendrás estas bendiciones, si no obedeces la maldición está a la puerta. Así de sencillo es Dios.
Resumí aquí las bendiciones que conllevan el amar a Dios y guardar su Palabra:
- Me irá bien todos los días de mi vida a mí, a mi hijo y al hijo de mi hijo
- Tendré largura de días
- Tendré justicia siempre
- Dios arrojará mis enemigos delante de mí, Él será quien los derrote
- Seré multiplicado
- No habrá escasez en mi mesa
- No me faltará nada
- Seré bendito en mi ciudad y en el campo
- Benditos serán mis hijos
- Benditas serán mis despensas
- Bendito seré al salir y al entrar
- Dios bendecirá mis negocios y todo lo que produzca mi mano
- Me hará sobreabundar en bienes
- Derramará lluvia en el tiempo necesario
- Me pondrá en liderazgo
- Quitará toda enfermedad
- Dios mostrará su bondad en mi vida
Dios te ha escogido para ser especial. Dios quiere bendecirte aún más. Él quiere que tú alcances completamente sus bendiciones, pero debes amarle y serle fiel en todo.
Deuteronomio 7:6-9 “…Jehová tu Dios te ha escogido para serle un pueblo especial, más que todos los pueblos que están sobre la tierra. No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová y os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos; sino por cuanto Jehová os amó, y quiso guardar el juramento que juró a vuestros padres… Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones…”
Deuteronomio 5:29 “…¡Quién diera (ojalá) que tuviesen tal corazón, que me temiesen y guardasen todos los días todos mis mandamientos, para que a ellos y a sus hijos les fuese bien para siempre!..”
Dios nos ama y su deseo es ver en nosotros una respuesta de amor, de fidelidad, gratitud, de adoración, de servicio para poder bendecirnos aún más. Dios no sólo ama sino que retribuye la respuesta a Su amor con promesas de bendiciones generacionales.
CIERRE:
Decide amar y ser fiel a Dios, es la más grande decisión que puedas tomar en tu vida. Cuando amas a Dios no te cuesta seguirlo, no te avergüenza identificarte como Su hijo… “Él es fácil de amar…” es fácil amar a alguien perfecto, Él ya hizo todo, Él cumplió la parte difícil de esta relación de amor, lo único que queda es seguirlo y amarlo, pero como Él espera: con todo mi corazón, mi alma, mi mente y mis fuerzas.
Hoy te invito a que tomes la mejor decisión para tu vida: Busca a Dios, ámale más, se fiel, camina de Su mano cada día de tu vida. Te invito a crecer como hijo de Dios y al crecer como hijo de Dios creerás como persona.
El amor a Dios y Su Palabra tallada en nuestros corazón nos lleva a disfrutar de Sus innumerables bendiciones que trascienden a las generaciones venideras porque simplemente a Él le place bendecir aún más la fidelidad.
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