Bosquejos para Predicar
Prédica de Hoy: Esfuérzate – ¡sí Señor!
Bosquejos para Predicar Lectura Bíblica de hoy: Josué 1:9
INTRODUCCIÓN:
Ha lidiado su contienda en sus fuerzas, ha arremetido a los problemas de la vida con arrojo, pero esto ha hecho que sus fuerzas disminuyan. Decae hoy débil, cansado y agotado; considera a su alrededor y ve en la montaña la empinada cuesta, las vallas a saltar, tiempos de espera antes de la cosecha, los retos y batallas a tomar.
Cree que es demasiado para él; anduvo actuando responsablemente en la obra que se le encomendó divinamente, inició la carrera según lo planeado. La meta parece ya lejana, voces de desaliento, amigos que murmuran, acorralado por contingencias, todas muy adversas… no tiene ya las fuerzas para continuar.
Hay un mensaje bíblico muy oportuno para estas circunstancias y es nada más y nada menos que una orden, un mandato y dictamen de parte del Rey y Señor ¿Cuál es esta orden?
1. ESFUÉRZATE, UNA ORDEN: (JOSUÉ 1:7-9, 23; DEUTERONOMIO 31:6-8)
En los estudios bíblicos uno puede ver claramente la orden de Dios para su pueblo, para cada uno de sus amados hijos, «que te esfuerces y seas valiente».
Es imperativo entonces que el creyente tome fuerzas de donde hay muy poco y reanude toda actividad en la que está inmiscuido, con mayor denuedo y valentía, haciendo caso omiso a los distractores, tal como ordena el señor.
Ya que Él también proveerá las fuerzas y, lo más importante, su misma presencia, caminando al lado tuyo. Es la que respaldará tu obra en todo lo que emprendas. Él es el punto de partida para toda acción.
2. ESFUÉRZATE, DIOS RESPALDA (DANIEL 10:19)
Por su gran amor concede la paz y manda a esforzarnos, porque una vez puestos en movimiento nuestro Dios multiplicará nuestras fuerzas. Si es que no se tuviera ninguna, como las del búfalo. El imperio y la fortaleza son de Dios, Él es Jehová no hay nada imposible para Él.
3. ESFUÉRZATE, EN LO FÍSICO: (ISAÍAS 35:3)
Una orden para poner en acción y fortalecer cada parte del cuerpo, las manos, la rodilla, los pies. Una manera de cuidar el templo de Dios es ponerla en movimiento.
