No te Olvides

Así que después de oírle, y escuchar su dilema, le invite a que viniese a la iglesia para orar por él. Le dije que viniera en el día de hoy e impondríamos manos y le pediríamos a Jesús que resolviera esos problemas por él. Su respuesta a esto fue una negativa.

Entonces él me dijo que si el tenia una victoria sobre estos problemas, seria porque lo hizo él y no alguien llamado Jesús. Pero ven, su actitud no se aleja mucho de las actitudes de algunos de nosotros.

El ciertamente tiene un corazón bien duro, pero en realidad, cuando llega el momento de hacer las cosas para Dios todos podemos ser iguales. Creemos que somos mas que capaces de resolver nuestros problemas, pensamos que lo que tenemos es por que lo hemos obtenido solos. Les digo que esto es lo más lejano a la realidad que se puede estar.

Les pregunto esto: ¿Cuantos aquí vivimos en paz?; la otra pregunta: ¿Obtuviste esa paz tu solo? Cómo dicen los Americanos ¡NO WAY JOSÉ! Jesús es el que nos dio esa paz y es El único que nos la pudo dar. Si Él no hubiese entrado en nuestras vidas, entonces estaríamos todavía perdidos en el desierto, todavía estuviéramos sufriendo de esa sed insaciable. ¿Podemos acordarnos de donde Él nos saco?

Nunca podemos olvidarnos de donde Él nos saco, porque cuando nos olvidamos entonces Él se convierte en cosa secundaria en nuestras vidas. Él nunca puede ser cosa secundaria en nuestras vidas, Él siempre tiene que ser primero. Cuando nos olvidamos de donde nos saco, se nos hace fácil ignorar sus mandatos. Se nos hace fácil desobedecer sus mandamientos.

Cuando se nos olvida de donde nos saco se nos hace fácil hacer excusas, se nos hace fácil dar explicaciones sin sentido; se nos hace fácil ponerle en segundo lugar. Cuando se nos olvida de donde nos saco se nos hace fácil olvidar que fue Él quien nos ha puesto donde estamos, que fue Él quien nos ha dado todo lo que tenemos, que fue Él quien nos libero de la esclavitud.

El problema es que tenemos tan mala memoria que siempre le ponemos a Él en segundo lugar. Recibí una llamada telefónica no hace mucho de un hermano aquí en la iglesia. Este hermano estaba bien preocupado por que en uno de los servicios, él miro a su alrededor, y vio una gran mayoría de los asientos vacíos. Pienso que también él alcanzo a ver la tristeza en mis ojos ese día según alabábamos, porque esa noche él me llamo a la casa.

Él me llamo y me dio palabras alentadoras y me explico la gran bendición que era para él y su familia ser parte de esta congregación. Sus palabras de inmediato alzaron mi espíritu, que déjenme decirles estaba bien bajo.

Pero ven, este incidente que produjo la llamada telefónica es exactamente de lo que les estoy hablando cuando digo que ponemos a Dios en segundo lugar. Es exactamente lo que les quiero decir cuando digo que se nos ha olvidado lo que Dios ha echo por nosotros. Porque si nos acordaremos constantemente de donde Él nos saco, no hubiera excusas para apartarnos de Él.

Para concluir. No podemos permitir que ser olvidadizos, no nos podemos permitir que olvidemos lo que Él a hecho por nosotros. Fuimos liberados de la esclavitud, fuimos liberados del mundo. Fuimos escogidos por Dios para servirle.

Tenemos que acordarnos de todos esos años que pasamos perdidos en el desierto, el sufrimiento, los dolores, esa carga tan pesada que una ves teníamos. Tenemos que acordarnos que Dios y solo Dios nos dio descanso, alivio nuestras penas.

No podemos olvidarnos de todo lo que Él ha hecho por nosotros, si lo hacemos entonces será fácil que Él ocupe el segundo lugar en nuestras vidas y nuestros corazones.

Él nunca puede ser el segundo lugar, Él tiene que ocupar el primero. Hermanos, nuestro primer pensamiento al levantarnos en la mañana debe ser dándole gracias a Dios por su misericordia, y por su gracia.

El ultimo pensamiento antes de dormir debe ser dándole gracias a Él por las bendiciones que recibimos todos los días, dándole gracias a Dios por su presencia en nuestras vidas. Cuando hacemos esto Dios no toma el segundo lugar.

Tenemos que vivir según su voluntad cumpliendo con sus mandatos; Él siempre tiene que ser lo primero en nuestras vidas. No nos olvidemos de donde nos saco, tengamos eso siempre presente en nuestras memorias. Escucha hoy: “..Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios…”

© José R. Hernández. Todos los derechos reservados.

Predicas Biblicas… Predicaciones Cristianas Escritas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio