Salir de nuestra zona de confort

III. Salir de nuestra zona de confort – Dios pone las cosas en su lugar

1. Tiempo para todo (Eclesiastés 3:1-15)

Los momentos de aflicción no son para siempre. Suelen ser necesarios, porque de ellos aprendemos y crecemos, pero no duran una eternidad, pues solo el amor de Dios es infinito. Entonces ¿hay que vivir saliendo de nuestra zona de confort todo el tiempo?

Hay que confiar en qué todo lo qué sucede es parte del plan de Dios. Todo tiene su tiempo y se acomoda en lo que él quiere para nosotros. Eso significa qué habrán momentos donde la paz será desmedida, mientras qué en otros debemos tomar previsiones.

Lo importante es qué sepamos estar dispuestos y disponibles para cada momento, sabiendo qué Dios siempre pone las cosas en su lugar.

2. Dios no cambia (Malaquías 3:6)

Mientras nosotros nos movemos, guiados por su presencia, y aprendemos de lo qué vivimos, Dios se mantiene firme e inmutable. Esto es un gran alivio pues significa qué podemos confiar en él.

Sus promesas y bendiciones son para siempre. No se arrepiente ó falla. No tiene las inseguridades qué nosotros enfrentamos porque él es Todopoderoso. Nada puede dar mas paz qué saber sobre su incomparable amor y qué aún sin ser dignos, él nos recibe en su gracia.

¿Sientes miedo? Dios nos espera, nos hace valientes y junto a él no hay nada qué perder.

Conclusión

A todos nos gusta disfrutar de la paz, estar confortables y qué las preocupaciones se aíslen. Sin embargo, a veces por miedo de perder la “estabilidad” perdemos oportunidades qué Dios nos entrega para bendecir nuestras vidas. ¿Imaginas perderte de la salvación por miedo de afrontarla?

Necesitamos ser valientes, abrir los ojos y estar a disposición de su voluntad superior a la nuestra. Nada puede vencer lo qué el Padre construye para nosotros.

Salir de nuestra zona de confort nos hace fuertes. Enfrentar miedos hace qué podamos superarlos. Todos alguna vez debimos aprender algo qué parecía imposible ¿valió la pena? Ese valor qué expresamos tiene un gran mérito ante los ojos de Jehová.

Siempre es un regalo reconocer a Dios como nuestro guía , siendo así sabemos qué todos los altibajos de la marea nos acercan mas a la meta. Todas las pruebas pueden ser atravesadas y nuestra seguridad ya no depende de una circunstancia, sino de qué él está con nosotros. Eso nadie nos lo puede quitar.

© José R. Hernández. Todos los derechos reservados.

PredicasBíblicas.com … Predicas Cristianas Escritas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio